Mario vs. Sonic

Hola mochuelines,

Hoy me propongo recordar esos tiempos en los que los fans de los videojuegos recibíamos dos auténticas joyas de la historia que iniciarían así una rivalidad encarnizada, que dio lugar a miles de discusiones entre amiguetes por escoger al mejor. En el 92 o eras de Nintendo o eras de Sega, y eso equivalía a ser de Mario o de Sonic. Ni siquiera yo, que siempre fui muy diplomático, de esos que simplemente admiran un buen juego venga de donde venga, me mantuve al margen y como tenia una NES y el Super mario bros al principio me decanté por las aventuras del fontanero. Eso si, cuando pude jugar a Sonic por primera vez me pareció algo alucinante y siempre había tenido ganas de jugarlo en profundidad. Hasta ahora.

En el año que acaba de terminar he jugado a los dos juegos que en la época de los 16 bits reinaron por encima de los demás: Sonic y Super mario world.

Sonic llegó a España en octubre del 91, coincidiendo con la aparición de la revista Hobby consolas. Mega drive recibía así a quién acabaría siendo la gran mascota de Sega, con un juego de plataformas muy distinto a lo que nos tenía acostumbrado Mario en la NES. El mundo de Sonic era más colorido, sacando el mayor partido posible al talón de Aquiles de Mega drive, que era su escasa paleta de colores comparada con su futura rival, pero si algo destacaba en comparación con Mario era su velocidad, clave para entender la extraordinaria jugabilidad de Sonic. También destaca especialmente la música, con algunas de las mejores melodías que he oído en un videojuego, especialmente Green Hill zone y Star zone.

Mi experiencia ha sido incluso mejor de lo que esperaba. Sonic es un juego divertido y adictivo, de los que invitan a rejugar hasta saberselo de memoria. Tiene la dificultad muy ajustada, un diseño de niveles acertado y una longitud que sin ser largo da todo lo que se le puede exigir a un juego de esas características.

Super mario world llegaría como título de salida de Super nintendo solo 9 meses más tarde, y presentaba un juego mucho más largo, técnicamente correcto aunque bastante lejos de las maravillas que años más tarde se iban a poder ver en Super nintendo, si lo comparamos con Donkey kong country o con Yoshi's island por ejemplo. Eso sí, a nivel artístico cumplía sobradamente, con un diseño de niveles sublime, unas melodías muy buenas y una jugabilidad que, aunque era en parte conocida al haber precedentes en NES, fue perfeccionada en esta entrega al máximo. Por su longitud, con decenas de secretos que lo llevaban a otro nivel, y con esa dificultad creciente que ya empieza a vislumbrarse a partir de la tercera área, Vanilla dome, el juego tiene una vida enorme y completarlo al 100% no es una tarea nada fácil.

De hecho, escribo esto con la urgencia que me he autoimpuesto de escribir ya un post que tenía en mente desde que hace varios meses ya terminara Sonic y decidiera empezar este Mario world, pero teniéndolo a medias. Y es que jugando sin guías ni ayudas ni estados de guardado ni trucos, con una experiencia fiel a la original, acabo de derrotar a Bowser, y aún así siento que sólo he arañado la superfície de este juegazo, al ver el mapa con tantos caminos no descubiertos.

¿Todas las llaves secretas? Creo que yo solo conseguí una...

Mi veredicto de persona diplomática debería llevarme a un empate en esta batalla, ya que Sonic y Super mario world son dos juegazos al nivel de la leyenda que hay en torno a ellos como, posiblemente, los mejores juegos de plataformas 2D de la historia, y aunque hay aspectos en los que el vencedor es el erizo y otros donde gana el fontanero, un empate es un resultado más que justo. Creo que, más allá de mi favoritismo por Mario, la rejugabilidad de Super Mario World decantaría la balanza ligeramente a su favor, ya que el 100% con Sonic se basa en recolectar las seis gemas en los bonus, mientras que SMW tiene muchos más secretos, más variedad de niveles (aunque son más cortos), y acceso directo a ellos a través del mapa lo que ayuda a la hora de jugar un nivel concreto. Pero el músico que hay en mi quiere darle la victoria a Sonic por hallarse en él dos composiciones que superan a cualquiera de las que se pueden escuchar en SMW (ojo, que la música de Mario también es cojonuda).

Así que sí, les daré un empate, ya que depende del día que me preguntes daría vencedor a uno o a otro, y los equiparo además a Donkey kong country en mi podio de juegos de plataformas 2D.

Saludos mochuelines, y feliz año 2017!